Thursday, May 31, 2007



DIETA DE LA ZONA: (2º parte)



De acuerdo con lo prometido, he aquí una minuta para el segundo día de la dieta de la zona.
Corresponde a una dieta de 1.200 calorías diarias.
DIA Nº 2
Desayuno (08:30 hrs):
1 taza de leche descremada.
2 rebanadas de pan molde integral con
pasta de pollo con pimentón.
(50 gr. pechuga pollo molida mezclada con 1 trozo pimentón rojo y 1 cucharadita de aceite de oliva).
Colación (11:00 hrs):
250 grs. de yogurt sin azúcar con una nuez picada.
Almuerzo (13:30 hrs):
Fideos integrales con pavo y verduras:
1/2 taza de fideos integrales cocidos con 80 grs. de pavo picado , mezclado con 1 tomate mediano picado en cuadritos y 1 taza de apio cocido (al dente) picado. Todos los ingredientes se mezclan en un solo plato con 1 1/2 cucharadita de aceite de oliva.
Colación (once) 17:30 hrs..
2/3 de leche descremada con 1/2 plátano chico y 4 almendras (se mezcla todo en una licuadora).
40 grs. de quesillo.
Cena (21:30 hrs.)
Salpicón de verduras con carne y clra de huevo:
50 gr. Brócoli (1/2 taza)
50 gr. de coliflor (1/2 taza).
50 gr. porotos verdes (1/2 taza).
50 grs. de zanahoria (1/2 taza).
1 clara de huevo cocida.
60 gramos de asiento cocido picado (trozo de 7 x 6 x 1 cms.)
1 taza lechuga picada.
1 papa chica (tamaño huevo) en cuadritos.
5 aceitunas.
1 cucharadita de aceite de oliva.
Se cocinan las verduras al vapor (brócoli, coliflor, porotos verdes, zanahoria, papas) agregándolas alternadamente según el tiempo de cocción de cada una: primero papas y zanahoria, luego porotos verdes y finalmente brócoli y coliflor, deben quedar al dente.
Se combinan con la carne cocida picada, clara de huevo cocida picada, aceitunas y se les agrega finalmente la lechuga cruda picada, las aceitunas y aceite de oliva. Mezclar y a degustar.

Durante el día se debe beber alrededor de 8 vasos de agua, no con las comidas, entre las comidas.

Mañana la minuta Nº 3.



Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)
www.bajardepesoesunarte.com



Wednesday, May 30, 2007


LA DIETA DE LA ZONA


Este texto corresponde al desarrollo del tema en el programa "Puro Cariño" que conduce Rafael Araneda en radio Cariño


Rafael Araneda:

Existe una fórmula perfecta para bajar y mantener el peso, andar lleno de energía y envejecer tardíamente. La siguen Madonna, Jennifer Aniston, Cindy Crawford y lo avala la escuela de medicina de Harvard. Esta formula se llama “dieta de la zona”, la descubrió el Dr. Barry Sears hace alrededor de 15 años. Mientras trabajaba como bioquímico en la investigación de medicamentos para combatir los males cardíacos y diabetes, pensó que el mismo principio que regía para los medicamentos podía ser aplicable a la dieta, esto es la existencia de una zona terapéutica, por debajo de la cual el medicamento pierde efectividad y sobre la cual el producto causa toxicidad.
Hoy analizaremos las verdades de esta verdadera revolución de la dietética:



¿Cuál es la dieta de la zona?

El Dr. Sears plantea que los alimentos son capaces de regular la producción de las hormonas de nuestro organismo y por esta vía favorecer una salud que evitará enfermarnos, favorecerá un sano envejecimiento y evitará la aparición de las temidas enfermedades crónicas no transmisibles.

Existen en nuestro organismo hormonas que son estimuladas por la alimentación, estas son la insulina y los eicosanoides. La insulina debe estar en un perfecto equilibrio entre el consumo de hidratos de carbono y la cantidad secretada, un consumo exagerado de hidratos de carbono favorece un aumento en la producción de insulina situación que conlleva a un aumento en el almacenamiento de las grasas, en vez de favorecer el uso de la grasa corporal como productora de energías.
Los alimentos que aportan carbohidratos deben ser restringidos, particularmente aquellos que tienen efecto violento sobre la glicemia o azúcar de la sangre como el azúcar, la miel, el pan blanco, las pastas, el arroz, las papas y todos los productos hechos con harina blanca. En su lugar favorecer el consumo de aquellos alimentos cuyos hidratos de carbono tiene un efecto moderado sobre la glicemia y en consecuencia evitan la sobreproducción de insulina, estos son frutas, verduras, cereales integrales y legumbres. La fibra dietética presente en estos alimentos dificulta la disponibilidad de los hidratos de carbono a nivel digestivo y por consecuencia su incorporación al torrente sanguíneo.

¿Qué son los eicosanoides?

Son hormonas que regulan los procesos inflamatorios. Estas sustancias derivan de ácidos grasos presentes en nuestra dieta. Los ácidos grasos provenientes de los vegetales, presentes en los aceites de maravilla, uva, maíz, etc., corresponden a los denominados omega 6, los eicosanoides formados con ellos favorecen la inflamación, por otro lado los ácidos grasos provenientes de de los pescados de agua helada como jurel, salmón, sardinas, bacalao, aportan los conocidos omega 3 cuya función es anti inflamatoria efecto que constituye un elemento protector de las enfermedades del corazón. Si bien es cierto, ambos ácidos grasos son necesarios para la salud, la inmensa desproporción con la que son consumidos genera efectos deletéreos en la salud. Cabe mencionar que todas las enfermedades crónicas tienen como causa subyacente la inflamación, es así como se reconoce a nivel científico que la diabetes, la hipertensión, la hipercolesterolemia, la obesidad y el cáncer son enfermedades inflamatorias, siendo el endotelio, la capa interna de las arterias, la que se ve afectada con este proceso. Esta inflamación esta bajo el control de los eicosanoides

El Dr. Sears propone la necesidad de mantener un equilibrio entre los aceites omega 3 y omega 6, para lo cual se requiere reducir el consumo de aceites vegetales y aumentar el aceite de pescado, rico en omega 3. Las necesidades de omega 3 no se cubren con el pescado a menos que esté presente en la dieta todos los días, la mejor forma es la suplementación con concentrados de EPA (ácido eicosapentanoico) y DHA (ácido docosahexanoico), 2 ácidos grasos presentes en el aceite de pescado, conocido como omega 3, estos concentrados se encuentran en el mercado en forma de cápsulas y en aceites.

¿Como llevamos estos conceptos a la mesa, a la comida de cada día?

La dieta de la zona plantea la distribución de los alimentos en 5 comidas diarias 2 de las cuales serán ligeras, nunca deben pasar más de 4 o 5 horas entre una y otra comida para evitar una mayor producción de insulina, respetando 8 horas de ayuno en la noche.
En la dieta de la zona los hidratos de carbono representan el 40 % de las calorías totales, las proteínas un 30 % y las grasas un 30 %. Esto significa que una dieta de 1200 calorías debiera tener 90 gramos de proteínas, 40 gramos de grasas y 120 gramos de hidratos de carbono. La dieta de la zona tiene características hipocalóricas con un consumo diario que está entre las 1.200 y 1 500 calorías.

¿Cuáles son los beneficios de esta dieta?

Seguir la dieta de la zona significa llevar un estilo de vida que permite controlar la insulina a través de los alimentos, también los alimentos permiten el control de los procesos inflamatorios de tipo crónico, reduciendo las principales causas de muerte en el mundo Occidental, alarga nuestra vida y mejora la calidad de esta.Además, según Sears esta dieta es fácil de seguir y evita desórdenes alimenticios ya que “controlar la insulina nos ayuda a controlar las emociones y la sensación de hambre”. Así, un antojo de carbohidratos (azúcar, chocolate, etc.) no sería más que la respuesta hormonal a una comida anterior inadecuada para la bioquímica de la persona.

¿Qué alimentos comer y cuales no?

Esta dieta establece 3 grupos de alimentos:

Alimentos restringido o controlados (consumo ocasional): embutidos (también hay que controlar el jamón de cerdo), carnes grasas, grasas saturadas, pastelería y dulces.

Moderados: huevos, carnes magras e hidratos de carbono refinados (pasta, arroz y papas). Sears recomienda comer de 1 a 2 huevos por semana y de 1 a 2 porciones diarias de carne magra.

Ilimitados: frutas, verduras, lácteos desnatados, pescado y agua. Las verduras u otros alimentos deben ser aliñados con aceite de oliva. Hay que tomar: 1 a 2 raciones diarias de pollo o pescado, y 3 a 5 porciones de frutas o verduras diarias. Además del aceite de oliva, las otras grasas saludables son los frutos secos o las paltas.

Además de la proporción de alimentos, hay que tener en cuenta la cantidad, y ésta depende del sexo, peso, porcentaje de grasa corporal y actividad física de cada individuo.
Sears también recomienda beber dos litros de agua diarios y hacer al menos 30 minutos de actividad física tres veces por semana.


Ejemplo de minuta para dieta de la zona:


DIA 1


Desayuno

1 taza leche descremada con 1 cucharada sopera de avena más 3 nueces.
1 rebanada jamón
1 naranja mediana.

Colación

1 trozo de quesillo 50 grs. (1/3 pote chico)
1 yogurt sin azúcar con 3 almendras.

Almuerzo

Salmón a la plancha100 grs. (1 palma de la mano)
Lechuga: 1 taza con 1 taza de coliflor (con limón y sal)
1 plátano chico

Colación

¾ taza leche descremada.
1 rebanada pan molde integral con 1 rebanada de jamón de pavo.

Cena: Pollo con puré de verduras

Pollo 80 grs.
Puré: 100 grs. Zapallo 1 taza, 1 papa tamaño huevo, 1 taza de acelga, todo medido en crudo.
Aceite oliva 1 cucharadita.
2 tunas.



Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)

Wednesday, May 23, 2007




DIABETES Y EL PELIGRO DE ABANDONAR EL TRATAMIENTO.




Texto correspondiente al desarrollo del tema en el programa "Puro Cariño" que conduce Rafael Araneda en "Radio Cariño"


Rafael Araneda:

La semana pasada al término de nuestra conversación respecto de la resistencia a la insulina, recibimos 2 correos electrónicos, cuyo tenor era muy similar. En uno de ellos, una auditora de nombre Luisa nos escribía lo siguiente:
“hola…respecto a la resistencia a la insulina y diabetes….yo la verdad no he ido a un doc para ke me diga si tengo esto pero….lo ke si me pasa es una especie de tiriton cuando pasa mucho rato sin comer…sobretodo a media mañana ….es eso tb un indicio? ….será necesario consultar a un doctor? gracias…”
y en el otro correo Elizabeth señalaba:
hola Rafa respecto a la diabetes… la verdad es que yo no me estoy cuidando mucho…soy diabética con todos los síntomas que se pueden tener…la duda que me asalta es que antes tomando medicamentos y cuidándome igual me sentía mal y a ratos con tiritones…ahora me cuido a veces y generalmente me tirita lamano izquierda será producto también de la diabetes y mi descuido.
¿Es habitual que la gente abandone el tratamiento como lo deja de manifiesto nuestra amiga Elizabeth?



Es muy habitual, en la encuesta de prevalencia de diabetes realizado en Chile por la asociación de diabéticos de Chile, se pudo determinar que el 75% de las personas con diabetes tienen un mal control, si bien es cierto las causas de este mal control son múltiples, una de ellas es el abandono del tratamiento.
Cabe hacer mención de los múltiples anuncios de tratamientos mágicos que apuntan a la gran esperanza de cura definitiva que las personas con diabetes abrigan, esto conduce normalmente al abandono. Es frecuente encontrar en los medios de comunicación promoción de “pócimas mágicas” que curan de todo, diabetes, hipertensión, bajan el colesterol y de paso eliminan los molestos callos. Finalmente se comienza a divulgar entre los amigos y parientes de los pacientes. En este sentido es importante señalar enfáticamente que aún no se conoce una cura definitiva para la diabetes, solo podemos asegurar que tiene tratamiento y que este conduce a una buena calidad de vida.
El tratamiento de la diabetes debe construirse sobre 3 pilares fundamentales, la dieta, la actividad física y la medicación. Los pacientes, habitualmente abandonan la dieta y la actividad física, probablemente por aburrimiento y también por la incapacidad de los equipos de salud para prescribirlos de modo que resulte entretenido y lograr que se tome una real conciencia de la importancia de mantener de por vida una dieta saludable y actividad física compatible con un estilo de vida saludable.



¿Porqué los 2 auditores coinciden en señalar la presencia de tiritones?



Tanto en la diabetes como en la resistencia a la insulina puede presentarse una condición conocida como “hipoglicemia”, esto ocurre cuando los valores de glucosa o azúcar de la sangre se encuentran por debajo de los valores normales, situación que se manifiesta con temblores, dolor de cabeza, palpitaciones, sudoración, sensación de fatiga, todos síntomas muy desagradables que pueden ser prevenidos con el solo hecho de respetar las características de la dieta que el profesional nutricionista le indica al paciente. Esto debe entenderse como, la necesidad de incorporar en todas las comidas, una cuota de hidratos de carbono suficiente como para aportarle a nuestro organismo, aproximadamente, la mitad de las calorías que se requieren para mantener nuestras funciones vitales y de actividad física. En un paciente con insulina o con hipoglicemiante como la gliblenclamida, el riesgo de una hipoglicemia es muy alto si no se tiene una dieta ordenada y adecuadamente controlada.


¿Qué otras complicaciones puede presentar una persona que no sigue el tratamiento de la diabetes como corresponde?



Son conocidas las complicaciones crónicas de la diabetes, todas ellas como consecuencia de un estado de hiperglicemia permanente, vale decir, una diabetes descompensada. Las complicaciones afectan a la vista, conocida como retinopatías (puede causar ceguera), a los riñones o sea nefropatías (puede evolucionar a insuficiencia renal) y a los nervios conocidas como neuropatías (que ocasiona dolores intensos), respectivamente. La hiperglicemia afecta todo el sistema cardiovascular haciendo proclive los estados de isquemia (menor llegada de oxigeno al músculo cardíaco) que pueden derivar en infartos o afectar las arterias cerebrales produciendo enfermedad cerebro vascular. El abandono del tratamiento de la diabetes puede conducir a la muerte.



¿Por cuanto tiempo se debe mantener el tratamiento con dieta?



La dieta, como el tratamiento en general se debe prolongar de por vida, probablemente con el tiempo sufra cambios, modificaciones o adaptaciones a situaciones puntuales, por ejemplo si aparece una hipertensión u otra patología. La diabetes, no se debe olvidar, es una enfermedad crónica, esto es, puede ser controlada pero no se cura por lo que permanece toda la vida.
Una persona con un buen tratamiento puede hacer una vida normal, evitar o retrasar la aparición de complicaciones como las ya mencionadas. Si las complicaciones aparecen serán de menor intensidad que en un paciente que ha abandonado el tratamiento.



¿Como debe actuar una persona que tiene antecedentes familiares de diabetes?



En este sentido es necesario entender la siguiente cascada de episodios: la primera acción debe estar orientada a evitar la aparición de diabetes en personas con riesgo de presentarla ya sea por antecedentes o por la presencia de una resistencia a la insulina. Si la diabetes se presenta, la acción debe estar dirigida a prevenir la aparición de las complicaciones, tanto agudas como crónicas, si las complicaciones se presentan, se deben tratar oportunamente para evitar las graves secuelas que pueden originar, como ceguera, insuficiencia renal, amputaciones, infartos.
Todas las acciones tienen un solo nombre y apellido: estilo de vida saludable.

Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)
www.bajardepesoesunarte.com




Wednesday, May 16, 2007


DIETA Y RESISTENCIA A LA INSULINA


Este texto corresponde al desarrollo del tema en radio "Cariño", programa "Puro cariño", conducido por Rafael Araneda.

Rafael Araneda:

Hoy en día, muchas personas, jóvenes y adultos, después de tomarse algunos exámenes de sangre indicados por el médico, reciben la noticia de tener “resistencia a la insulina”. Los expertos señalan que esta condición que se presenta como consecuencia de una dieta hipercalórica y del sedentarismo, predispone a la diabetes del tipo 2, sin embargo, esta es una situación que se puede revertir.

¿Que es la resistencia a la insulina?
La resistencia a la insulina es una cualidad del género humano, que favoreció la adaptación a la escasez de alimentos en tiempos pasados. Esto fue lo que le permitió al hombre primitivo sobrevivir en condiciones donde se alimentaba, con suerte, una o dos veces a la semana. Todavía gran parte de la humanidad porta el gen de la insulinorresistencia. Las personas que en la actualidad portan ese genotipo "ahorrador", son aquellos que al convertirse en obesos comienzan a presentar serios problemas de salud, que no presentaban mientras mantienen su peso normal. Ocurre cuando la dieta diaria es rica en grasa y azúcar, y cuando además no hacemos ningún tipo de actividad física.
Para poder entender este fenómeno es necesario tener en cuenta que nuestro organismo, como cualquier maquinaria que conozcamos, requiere de energía o “combustible” para funcionar. Este combustible es aportado por los alimentos que contienen una sustancia nutritiva conocida como “Hidratos de carbono”. Los hidratos de carbono son degradados a glucosa en el tubo digestivo y como tal pasan a la sangre donde la glucosa es transportada hasta las células para ser oxidada y así obtener de ella la energía. En esta etapa, la insulina, hormona producida por el páncreas, juega un rol fundamental, puesto que favorece la entrada de la glucosa a la célula. Cuando las células pierden sensibilidad a la acción de la insulina se produce una “resistencia a la insulina”, que el organismo compensa con una mayor producción de la hormona, fenómeno que se conoce como hiperinsulinemia.

¿Cuáles son las causas de la resistencia a la insulina?

No se sabe cuáles son las causas de esta condición. Se supone la necesidad de una predisposición en los genes y la participación de algunos factores vinculados al estilo de vida, como el sedentarismo, la obesidad y la mala alimentación. Además, la resistencia a la insulina ha aumentado en la medida que se han incrementado los casos de obesidad y desórdenes alimenticios, lo que hace suponer que las células grasas son grandes protagonistas en este
deterioro. El cuadro se completa con otros indicadores: un alto índice de masa corporal, especialmente la llamada obesidad central, condición que puede ser detectada con una simple medición de cintura. Un perímetro de cintura superior a los 88 cm. en mujeres y a 102 cm en hombres, da cuenta de una sospecha fundada de resistencia a la insulina. Se puede observar también hipertensión arterial. Una pigmentación oscura de la piel de cuello y axilas llamada “acantosis nigricans”, puede dar indicios de la existencia del problema. Es frecuente que, junto con lo anterior, los pacientes tengan el colesterol alto, hígado graso y/u ovario poliquístico, pues además de intervenir en el procesamiento de la glucosa, la insulina participa en el manejo y distribución de las grasas y en el efecto final de otras hormonas.

¿Cuáles son las consecuencias de la resistencia a la insulina?

En estos momentos las principales causas de muerte entre los chilenos son los infartos al miocardio, la hipertensión y la diabetes, todas patologías asociadas a la obesidad y además, todas ligadas a la insulinorresistencia y todas en franco aumento entre los chilenos. Por esta razón y dado que tenemos en nuestros genes esta condición, es que no deberíamos entregarnos a conductas sedentarias que nos hagan subir de peso. Tenemos que gastar las calorías que consumimos si no queremos que se conviertan en grasa, con el consiguiente riesgo, que esto significa, para nuestra salud.

¿Se puede tratar la resistencia a la insulina?

La resistencia a la insulina se debe abordar desde dos frentes:

El primero dice relación con la prevención del síndrome como tal y ello se logra con la formación de hábitos de vida saludable desde pequeños, particularmente en niños cuyos antecedentes familiares figura un pariente con resistencia a la insulina o diabetes.
El segundo frente está en los insulinoresistentes ya diagnosticados, porque una acción oportuna permitirá evitar la presencia a futuro de diabetes. Lo importante es pesquisar a tiempo esta condición, pues la evolución progresiva de la resistencia a la insulina puede revertirse mediante un cambio en el estilo de vida. Éste involucra, en primer lugar, ejercicio físico y una alimentación sana. Reduciendo la ingesta de azúcar, disminuye también la producción de insulina y, por lo tanto, la resistencia a su acción. La baja inicial de peso es más difícil que en personas normales por cual, en ocasiones, también se administran medicamentos que sensibilizan las células a la insulina con esto se disminuye su producción. Pero lo más importante es la detección precoz y el cambio de hábitos, que debe mantenerse de por vida para evitar la aparición temprana de una diabetes.

¿Cómo se debe abordar la resistencia a la insulina desde los alimentos?

La primera medida dice relación con la disminución o eliminación del azúcar de la dieta, en todas sus formas, la del azucarero y de los alimentos que la contienen (bebidas de fantasía, pasteles, tortas, caramelos, galletas, etc.). Luego es necesario restringir aquellos alimentos con hidratos de carbono refinados, como harina blanca (pan, fideos), arroz, papas. Favorecer el consumo de alimentos integrales como avena, harina integral y productos fabricados con ella como el pan y fideos integrales, también el arroz integral. Además, son productos integrantes de una dieta beneficiosa para el tratamiento de la resistencia a la insulina: frutas y verduras (5 al día), leche y productos lácteos con bajo contenido de grasa, carnes de preferencia blancas, pescado 1 o 2 veces por semana, huevo 2 o 3 unidades semanales y legumbres como porotos, garbanzos y lentejas que no deben estar ausentes en la dieta semanal. La dieta debe estar claramente orientada a la disminución del peso, para lo cual es necesario incorporar diariamente actividad física.

¿Es muy importante la actividad física?

Sin duda, lo es para la vida, y para el tema que hoy tratamos es fundamental, porque el tejido muscular consume el 80% del gasto diario de glucosa, por otro lado, tanto como el sedentarismo favorece la disminución del tejido muscular, el ejercicio permite el aumento de las células musculares y la calidad con la que estas funcionan, dado que aumenta – con el ejercicio - la irrigación sanguínea al músculo, aumentan los depósitos de glucosa en el músculo y la actividad de oxidación de las grasas dentro de las mitocondrias.



Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)

Wednesday, May 09, 2007

DIETA Y TERCERA EDAD


Texto correspondiente al desarrollo del tema en "Radio Cariño", programa "Puro cariño", conducido por Rafael Araneda.

Rafael Araneda:
En la medida que pasan los años y nos acercamos a la edad adulta, nos encontramos cada vez más cercanos a nuestra vejez y a la vez convivimos con la vejez de nuestros antecesores inmediatos: abuelos, padres, tios. Es muy habitual que nuestro grupo familiar nuclear se encuentre integrado por un adulto mayor y esta situación será cada vez más frecuente, el 11,4 % de la población nacional está conformada por adultos mayores, dentro de 10 años esta cifra se duplicará, lo que significa 3.5 millones de ancianos para el año 2.020.

¿Cuáles son los principales problemas de nutrición que enfrentan nuestros abuelos hoy en día?

Si bien es cierto, el envejecimiento de la población constituye una consecuencia del desarrollo social, económico y tecnológico, no es menos cierto que plantea problemas de índole médico, social y económico, no solo en Chile, si no que en el mundo. La población adulta mayor de 65 años, desde el aspecto nutricional, constituye un grupo biológica y socialmente vulnerable en cuanto a la cobertura de sus nutrientes. Los adultos mayores presentan muchas alteraciones nutricionales tanto por déficit como por exceso.
La alimentación del anciano es generalmente deficiente, monótona e irregular, situación que se ve agravada por una mayor dificultad del organismo para utilizar apropiadamente los nutrientes de la dieta. No se debe olvidar que muchos adultos mayores llegan a esta edad con enfermedades crónicas como obesidad, diabetes, hipertensión arterial, colesterol alto, cáncer, enfermedades cardiovasculares por lo cual su alimentación debe estar orientada al tratamiento de estas. Por otro lado, la falta total o parcial de la dentadura y por consecuencia el déficit masticatorio influye notoriamente en la calidad de la alimentación. Se debe recordar que un anciano con prótesis, tiene solo un 30% de la funcionalidad de un individuo con dentadura completa.

¿Qué factores, propios de la vejez, intervienen en la nutrición del anciano?

Los adultos mayores no son concientes sobre la necesidad de una dieta balanceada, situación común entre los hombres viudos que siempre dependieron de la mujer para su alimentación (en santiago en 40% de los hombres mayores de 70 años son viudos).
El factor más relevante en la deficiente nutrición del anciano son sus bajos ingresos que restringen la ingesta en cantidad y calidad.
Un factor muy significativo tiene que ver con el aislamiento social. Los ancianos que viven solo pierden interés por la alimentación. La alimentación en grupo favorece la actividad social y como consecuencia un mayor interés por la comida.
Los ancianos son portadores de impedimentos físicos, alrededor de la mitad de los ancianos mayores de 70 años presentan algún grado de impedimento físico que limita su capacidad para la obtención de alimentos y para su preparación. No es infrecuente encontrarse con ancianos que no comen durante todo el día o los que basan su dieta en pan y té. Los ancianos con impedimentos de carácter osteoarticulares como las artrosis y artritis u otras limitaciones, presentan un estado nutricional más deteriorado del de aquellos que se valen por si mismos.
Las depresiones, estados de confusión y las alteraciones cognitivas, frecuentes en los ancianos, no favorecen la independencia en la selección de los alimentos.

¿Cuales son las recomendaciones de alimentación que podemos dar para los ancianos?

Los ancianos, debido a la importante disminución de la actividad física y de la masa muscular, tienen un menor requerimiento de calorías, esto significa una restricción de las grasas, particularmente las saturadas, y de los hidratos de carbono, especialmente los refinados como el azúcar y los productos que la contienen. Sin embargo, para los demás nutrientes como proteínas, minerales, vitaminas, ácidos grasos esenciales, antioxidantes y fitoquímicos, sus necesidades son similares a las del adulto joven. Esto significa que su dieta debe contener lácteos de bajo contenido graso, carnes de preferencia magras, huevo, frutas y verduras, legumbres y cereales de preferencia integrales. Es necesario limitar el consumo de productos con alto contenido de grasas saturadas como: cecinas, carnes rojas (vacuno, cerdo y cordero), cecinas como hígado y sesos, yema de huevo, mantequilla, los que además contienen colesterol que favorecen las enfermedades al corazón. Se debe dar preferencia a los pescados y al aceite vegetal.

Es fundamental que la dieta del adulto mayor sea muy limitada en el contenido de sal, producto vinculado con la hipertensión arterial, la sal está presente en los alimentos envasados, en las cecinas, en la salsa de soya, etc.

¿Cuáles son los requerimientos de agua del anciano?

Este es un tema muy importante de tratar, debido a que los adultos mayores tienen deprimido el reflejo de la sed, sin embargo el agua es fundamental para mantener el buen funcionamiento de los riñones, evitar la deshidratación, mantener la temperatura corporal y facilitar la digestión. Los ancianos deben consumir alrededor de 8 vasos de agua diariamente incluidas las sopas, el té, las aguas de hierba, la leche, sin embargo, es preciso señalar que su consumo debe realizarse alejado de las comidas dado que su consumo junto con las comidas dificulta la digestión dado que diluye los jugos gástricos, cuya producción está alterada en el anciano, Por otro lado, debido a la disminución en la secreción salival a esta edad, los alimentos deben incorporarse húmedos para favorecer su deglución.

¿Qué y como debiera comer un adulto mayor?

En forma general se puede recomendar que el adulto mayor consuma en forma diaria: 1 a 2 panes; 1 taza de cereales como arroz o fideos; 2 platos de verduras crudas o cocidas; 3 frutas; 2 a 3 tazas de leche o yogurt, pudiendo reemplazarlas por quesillo o queso; 1 presa de pescado fresco o en conserva (1 a 2 veces por semana), pollo o pavo sin piel (1 a 2 veces por semana), legumbres (1 o 2 veces por semana), huevo (2 unidades semanales), carnes rojas en forma ocasional (1 vez por semana); 6 cucharaditas de aceite, de preferencia crudo, agregado a ensaladas y/o guisos de almuerzo y cena; reducir el azúcar y la sal. Los alimentos deben distribuirse en 4 comidas diarias: desayuno, almuerzo, once y cena pudiéndose agregar una pequeña colación (fruta) a media mañana o a media tarde.

¿Es recomendable la actividad física en el anciano?

Forman parte de los hábitos de vida saludable la alimentación y la actividad física, esta última cumple un rol fundamental, mejora la funcionalidad, favorece la circulación sanguínea, aumenta la capacidad respiratoria, fortalece los huesos y el corazón. Es recomendable realizar una caminata de 20 a 30 minutos diarios. Un adulto mayor debiera contar con pesas de 2 a 3 kilos para estimular la musculatura de los brazos. Los ejercicios deben hacerse con moderación para prevenir lesiones.

Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)

Wednesday, May 02, 2007


MUJER Y DIETA


Este texto corresponde al desarrollo del tema en el programa "Puro Cariño", en radio Cariño 104.9, conducido por Rafael Araneda.

Rafael Araneda (introducción):

La mujer, a través de la historia de la humanidad ha cumplido el rol fisiológico de la maternidad y el cultural del cuidado de sus hijos. A partir de la segunda mitad del siglo XX, los grandes cambios socioculturales y económicos la han integrado a la actividad laboral, social, política y económica. La necesidad de un adecuado desarrollo físico y biológico para seguir cumpliendo estos múltiples roles, sin que se dañe su salud ni la de los hijos, obliga ha entregarles los aportes nutricionales específicos que requieren en las distintas etapa de la vida. El banco mundial ha señalado: “Invertir y proteger a la mujer entre los 14 y 50 años de edad, ofrece los mejores retornos en salud, socioeconómico, productivo y demográfico, con evidentes beneficios para la familia, la comunidad y la economía mundial”.

¿Cuales son los problemas que enfrenta hoy la mujer derivados de la nutrición?

A partir de la adolescencia, la mujer tiene el doble de riesgo que el hombre de presentar obesidad. Esto debido a los actuales patrones de alimentación y actividad física. Una encuesta efectuada en la región metropolitana revela que el 29 % de las calorías de la dieta de la mujer derivan de las grasas y que en un tercio de ellas el aporte de calorías grasas superaba el 35%. Otros hechos destacables fueron el bajo consumo de frutas, verduras y lácteos y un alto consumo de azúcar. Se estima que el patrón de consumo de este sector de la población se alterará más en el tiempo favoreciendo el incremento de la obesidad y de las enfermedades crónicas no trasmisibles. Por otro lado, estudios chilenos orientados a pesquisar la prevalencia de factores de riesgo, señalan que el sedentarismo afecta a cerca del 80 % de las mujeres, a pesar que el criterio establecido para definir que una persona era activa, implicaba la realización de solo 2 sesiones semanales de 15 minutos de ejercicios físicos programados. La inactividad física en mujeres se presenta desde muy temprano en la vida, observándose un aumento sostenido en edades mayores y con mayor frecuencia en el nivel socio económico bajo.

¿Qué otros problemas de salud presenta la mujer además de la obesidad?

En la mujer, también son más prevalentes la hipertensión arterial (de un 20 a un 60 % dependiendo de la edad) y la diabetes mellitus tipo 2, ambas patologías asociadas a la obesidad y que constituyen junto con las enfermedades cardiovasculares isquémicas, las tres primeras causas de muerte en la mujer adulta.

Sin embargo, hoy quisiera destacar además, 3 problemas nutricionales ocasionados por carencia:

La osteoporosis, que también afecta más a la mujer que al varón y que suele manifestarse con fracturas patológicas frente a traumas mínimos y determina una gran morbi – mortalidad y costo en salud. La osteoporosis se asocia a una menor ingesta de calcio e inactividad física. Después de los 65 años la fractura de caderas en mujeres triplica a la del varón. Si bién es cierto, la osteoporosis afecta al adulto, debe prevenirse en las edades tempranas de la vida ya que durante las primeras 3 décadas de la vida se adquiere el 99 % de la masa ósea máxima, que corresponde a la reserva de calcio esquelética, para cubrir las necesidades de pérdidas fisiológicas de las edades posteriores. La masa ósea máxima depende, entre otros factores, del calcio de la dieta y de la actividad física. En la post menopausia y en la vejez, una adecuada ingesta de calcio también contribuye a prevenir la osteoporosis al retardar la pérdida ósea. Los estudios sobre nutrición del calcio señalan que dos de cada tres escolares ingieren menos del 50% de la recomendación diaria y que en las mujeres, la ingesta de calcio es menor que la de los varones. Estudios realizados por el Ministerio de Salud en población adulta y en embarazadas, también destacan el bajo consumo de productos lácteos que son los alimentos que más calcio aportan. Las mujeres deben consumir 4 porciones de lácteos al día para cubrir los requerimientos de calcio.

La anemia nutricional también es más prevalerte en la mujer debido a una mayor pérdida de hierro generada por los flujos menstruales. Afecta aproximadamente al 20% de las mujeres en edad fértil en los grupos de mayor riesgo social, asociada a un déficit de ingesta de hierro por bajo consumo de carne.

Otro componente de la dieta cuyo consumo está por debajo de la recomendación es la fibra. El bajo consumo de fibra dietética se asocia a un mayor riesgo de varios tipos de cáncer y también a obesidad. Estudios chilenos señalan que el consumo de fibra no sobrepasa los 15 gramos diarios que corresponde a menos del 60 % de lo recomendado por el instituto nacional del cáncer de los estados Unidos de América (25 a 30 gramos) para la prevención del cáncer colorectal y mamario. La fibra juega un rol importante en la protección de la mucosa del tracto digestivo previniendo la mayoría de los cánceres digestivos y de mama, que tiene una alta mortalidad en la mujer. El consumo diario de frutas y verduras en cantidad de 5 porciones diarias, como también de productos integrales contribuyen a disminuir la prevalencia de cáncer y favorece la mantención de un peso corporal adecuado.

¿Por qué se le da tanta importancia al ácido fólico durante el embarazo?

En la mujer que intenta embarazarse, junto con la importancia de mantener sus depósitos de calcio y hierro normales es fundamental preocuparse por el ácido fólico. Esta vitamina tiene un rol fundamental en la prevención de los “Defectos en el cierre del tubo neural”, malformación fetal que puede manifestarse como una anencefalia (ausencia de una parte importante del cerebro), o como espina bífida (medula espinal queda sin protección ósea). Al respecto cabe señalar que el cierre del tubo neural se produce entre el día 15 y 18 después de la concepción, de manera que esta completamente formado, en el momento que la mujer se entera que está embarazada.
Lo anterior significa que las mujeres deben asegurar un consumo adecuado de acido fólico previo a su embarazo, en tal sentido, junto con una dieta rica en verduras de hojas verdes, se ha recomendado que las mujeres con posibilidad de embarazo se les administre una dosis de 0.4 mgr. de ácido fólico al día. Sin embargo, y debido a la gran cantidad de embarazos no planificados se hizo necesario buscar la forma de asegurar una ingesta adecuada de ácido fólico, fue así como en Chile, a contar de enero del año 2.000, se fortificó la harina de panificación con 220 microgramos de ácido fólico por cada 100 gramos de harina, con lo cual se logra cubrir la recomendación de este micronutriente con el consumo de 2 panes diarios.

¿La obesidad es peligrosa durante el embarazo?

Un adecuado control del peso desde antes de la concepción es fundamental para disminuir el riesgo de malformaciones congénitas. Múltiples estudios demuestran que la obesidad y la diabetes son enfermedades que aumentan el riesgo de malformaciones congénitas, especialmente craneofaciales y músculo esqueléticas y que ambas patologías actúan en forma potenciada en la causa de estas afecciones.

¿Qué consejos finales podemos darles a las mujeres?
Es muy importante que la mujer que planifica embarazarse en el futuro cercano acuda a una consejería nutricional que permita corregir antes del embarazo, condiciones de malnutrición por déficit o por exceso, asegurar una adecuada ingesta de ácido fólico, hierro, calcio, y otros micronutrientes importantes para el desarrollo embrionario y fetal.



Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)