Monday, June 26, 2006

EL AZÚCAR, ¿PRODUCE DIABETES?.

No es fácil la respuesta, dado que existe la tentación inicial a eximirla de toda culpa. El azúcar, per ce, no causa diabetes, sin embargo, es un importante factor de riesgo, veamos por qué:
En primer término debemos decir que el azúcar es el único alimento que solo aporta calorías (aproximadamente 4 por gramo), por esta razón se le considera como un producto de "calorías vacias", para que se entienda el concepto, analicemos un producto rico en hidratos de carbono como la harina de trigo refinada. Este producto contiene 76,3 gramos de hidratos de carbono por 100 gramos de producto, también contiene 10,3 gramos de proteínas, 2,7 gramos de fibra, 5.9 miligramos de niacina y otro tanto de vitaminas del complejo B, 15 miligramos de calcio y otros nutrientes importantes para la salud. Esto a pesar de aportar una importante cuota de calorías también aporta otros nutrientes necesarios para la vida. El azúcar solo calorías.
El azúcar y los productos que la contienen en abundancia como los pasteles, tortas, caramelos, bebidas de fantasía, no sacian el hambre, si no que la provocan, esto debido a que son causantes de un aumento brusco de la glicemia (azúcar de la sangre) situación que provoca un aumento dramático de la insulina circulante (hormona encargada del equilibrio de la glucosa), lo cual lleva hipoglicemias (bajas de azúcar) frente a lo cual el organismo responde activando el reflejo del hambre y en consecuencia mayor consumo de alimentos.
El azúcar, junto con las grasas, es responsable de dietas hipercalóricas las que, acompañadas de una vida sedentaria, favorece la obesidad y esta es factor de riesgo de resistencia a la insulina, intolerancia a la glucosa y finalmente diabetes. Todos los anteriores conceptos de la evolución de un mismo mal "la diabetes".
El azúcar, por lo tanto, debe ser eliminada de la dieta de personas con sobrepeso y obesidad, restringida en personas con antecedentes familiares de diabetes y de consumo moderado en el resto de la población, mientras más moderado mejor, incluidos los niños. No se debe olvidar que el azúcar se encuentra oculta en una gran cantidad de productos alimenticios: galletas, tortas, pasteles, refrescos (jugos y gaseosas), caramelos, chocolates, pan envasado, conservas dulces, etc.
Una dieta saludable debe incluir el consumo de frutas, verduras, cereales integrales, lácteos descremados, semillas (nueces, almendras, maní), aceites vegetales, particularmente de oliva, canola y soya, carnes desgrasadas, pescado, leguminosas. Es necesario estar atentos al peso corporal, el que, en los adultos no debe aumentar, para ello baste con subirse a la balanza cada 2 meses o vigilar que el vestuario no se vaya haciendo cada vez más incómodo (estrecho).


Rafael Jiménez Lira
Nutricionista (Msc)